Como usar tu cerebro en una crisis

Sian Beilock, profesor de psicología de la Universidad de Chicago, se dispuso a examinar quién tiene más probabilidades de tener éxito bajo presión en su nuevo libro titulado “Choke: What Secrets of the Brain Reveal About Getting It Right When You Have To”, “Los secretos que el cerebro te revela acerca de cómo conseguir hacerlo bien cuando tienes que”.

Beilock encontró que el cerebro se mantiene frío con una combinación de práctica y refuerzo positivo. Aplicándolo tanto en las matemáticas como el los deportes.

Por ejemplo, los atletas tienden a equivocarse si empiezan a pensar demasiado acerca de la mecánica de sus movimientos en lugar de sentir su camino a través de algo que han ensayado varias veces. La mayoría de la gente tiende a equivocarse en los exámenes cuando se suprimen en vez de reconocer sus miedos, o insistir en los estereotipos negativos de sí mismos.

Así, la simulación de situaciones de alto estrés, la meditación, e incluso la auto-afirmación positiva sirven como nutrientes importantes al cerebro.

Mide tus posibilidades

Jonathan Tait-Harris no podía estar más de acuerdo. Hace varios años, el investigador británico de delitos de guerra comenzó a entrenar periodistas, trabajadores humanitarios, y diplomáticos, en la evaluación de riesgos y planificación de la respuesta para los ambientes hostiles y asolados por la guerra. Él dice que hay algunas correlaciones entre una máquina ATM y un secuestro por parte de combatientes talibanes en Afganistán.

Para empezar, tendrás que medir tus posibilidades de escapar contra sobrevivir a ser un rehén. El Departamento de Justicia de los Estados Unidos dijo a Discovery News que las personas que se defienden contra un agresor tienen menos probabilidades de perder su propiedad, pero más posibilidades de sufrir lesiones.

Jonathan Tait-Harris dijo: “El poder del cerebro es mucho mejor que el poder del puño o la patada en la espinilla. La gente con la que te enfrentarás por lo general es más fuerte, y estará mejor capacitada, además no eres Jean Claude Van Damme”.

También es necesario pensar acerca de cuándo y si se puede razonar con un asaltante.

La personas en general, hacen estas cosas a los demás porque los ven como diferentes, así que si hay alguna manera de demostrar que eres igual que ellos, entonces podrías aliviar la situación. En unos pocos momentos de miedo, es muy difícil establecer una relación, y si eres el ruidoso, agresivo, ellos podrían solo dispararte para que te calles, así que hay que saber mantener la calma.

Tipos de entrenamiento

Los cursos de autodefensa son más difíciles de revisar. Tait-Harris recomienda el “programa de ambientes hostiles” para las personas que se mueven en ambientes particularmente de alto riesgo, pero dice que cualquier entrenamiento de autodefensa es útil, siempre y cuando se complete.

Todo el mundo tiene una respuesta de congelación (se congelan unos segundos cuando algo sucede), así que estos entrenamientos reducen ese tiempo de espera, ayudando al cerebro a desarrollar un sistema de archivo mental donde intuitivamente se puede correlacionar una situación real o en una situación de crisis.

Se debe enseñar a la gente a no asustarse, a no tener miedo, la idea es que luego del entrenamiento ya no se sienten impotentes en una situación de crisis, porque tienen ahora una comprensión más realista de la violencia y cómo tratar con ella.